Tu nevera huele mal por esto: el truco definitivo para eliminar el olor

Pocos olores son tan desagradables como el que puede salir de una nevera cuando no se ha limpiado correctamente o cuando ciertos alimentos se descomponen sin que nos demos cuenta. Aunque muchas personas limpian el interior de la nevera con frecuencia, el mal olor puede persistir. Y lo más sorprendente es que, en la mayoría de los casos, el origen no está donde crees. Según expertos en limpieza del hogar, existe un punto clave que muchos olvidan, y es precisamente allí donde se acumula el verdadero problema. Hoy te explicamos cuál es ese error común y cuál es el truco definitivo para eliminar el olor de raíz.

Por qué huele mal tu nevera (y no es solo por los alimentos)

La mayoría de la gente piensa que los malos olores en la nevera se deben a alimentos en mal estado o mal tapados. Si bien esto es parcialmente cierto, el verdadero culpable muchas veces es el sistema de drenaje de la nevera, también conocido como canal de desagüe. Esta pequeña ranura ubicada al fondo del frigorífico recoge el agua de condensación, que luego se evapora en una bandeja trasera gracias al calor del motor. Sin embargo, con el tiempo, este canal puede acumular residuos de alimentos, moho y bacterias, generando un olor penetrante difícil de eliminar con una simple limpieza superficial.

El truco definitivo: limpia el canal de desagüe

El truco más eficaz para eliminar el mal olor consiste en limpiar a fondo el canal de desagüe de la nevera. Pocos lo hacen, pero es ahí donde suele estar el origen del problema. Para limpiarlo correctamente, necesitas seguir estos pasos:

  1. Localiza el canal: normalmente se encuentra en la parte trasera interior de la nevera, justo donde se forma el agua de condensación.
  2. Usa un bastoncillo o un cepillo fino: introduce suavemente un bastoncillo largo (puedes usar un palillo con un poco de algodón) para retirar los residuos acumulados.
  3. Desinfecta con vinagre blanco: llena una jeringa o una botella con dosificador con vinagre blanco puro y vierte el líquido dentro del canal. El vinagre eliminará bacterias y moho sin dañar el sistema.
  4. Enjuaga con agua caliente: repite el mismo proceso con agua caliente para arrastrar cualquier resto.
  5. No olvides la bandeja trasera: si puedes acceder a ella (normalmente está detrás del electrodoméstico), límpiala con un trapo húmedo con vinagre.

Otros consejos para mantener la nevera sin olores

Además del canal de desagüe, hay otras prácticas que te ayudarán a mantener tu nevera limpia y sin olores:

  • Guarda los alimentos bien cerrados, sobre todo los que tienen olores fuertes como el queso, cebolla o pescado.
  • Revisa cada semana si hay productos vencidos o en mal estado y elimínalos de inmediato.
  • Limpia los estantes y cajones con una mezcla de agua y bicarbonato de sodio para eliminar olores sin químicos agresivos.
  • Coloca un recipiente abierto con bicarbonato en una esquina del refrigerador: absorbe los malos olores de forma natural durante varias semanas.

Qué no hacer: errores que empeoran el problema

A veces, los intentos de eliminar el mal olor acaban empeorando la situación. Estos son los errores más comunes que debes evitar:

  • Usar ambientadores o esencias dentro de la nevera: no eliminan el olor, solo lo enmascaran, y pueden afectar el sabor de los alimentos.
  • Limpiar solo las superficies visibles: si no limpias el canal de desagüe, el olor volverá rápidamente.
  • Usar productos químicos fuertes: pueden dejar residuos que contaminan los alimentos y alteran su sabor.

Conclusión

Un frigorífico limpio y sin olores no solo mejora la experiencia en la cocina, sino que también prolonga la vida útil de los alimentos. Si tu nevera huele mal, el problema probablemente está en el canal de desagüe, y limpiarlo puede marcar la diferencia. Este truco, recomendado por expertos, es sencillo, económico y muy eficaz. ¿Lo has probado ya? ¿Conoces otros métodos que funcionen? ¡Comparte tu experiencia!

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